¡Por qué no debes contarle tus metas ni planes a nadie!

Hola,¿Cómo están? Espero que muy bien :). Hoy quiero hablarles de un tema que no es conocido para muchos, pero que nos demuestra como nuestro subconsciente y las emociones a veces pueden jugarnos una mala pasada a la hora de hacer realidad esos objetivos que nos hemos propuesto.

Se trata de el dilema entre contar o no contar tus sueños, tus planes, tus objetivos, a tus amigos, hermanos, familia o cualquier otra persona. Bien, pues entremos en materia.

Muchos de nosotros nos sentimos motivados, nos sentimos realizados al contar nuestros proyectos, nuestras metas, nuestros planes, nuestros objetivos a corto, medio o largo plazo. Sin embargo, este es precisamente el problema. El problema es que al contar nuestros sueños con detalle, y con mucho entusiasmo, nos sentimos realizados, y ese es el problema, que una vez hemos terminado de contar nuestros planes, perdemos esa motivación, ¿qué pasa cuando tu cumples una meta sea la que sea?  que te sientes realizado, y ¿Qué pasa cuando te sientes realizado? que dejas de hacer lo que tenías que hacer, que pierdes motivación, que pierdes esa expectativa y entusiasmo que tenías antes de contar todos tus planes con detalle. Y tan bien que nos sentíamos antes de contarles.

Esto tiene una explicación científica. El cerebro tiene grandes dificultades para diferenciar entre "Decir" y "Hacer". Es decir, el cerebro no diferencia cuando dices algo y cuando haces algo. Por lo tanto cuando estás contando tus metas o tus planes, tu cerebro lo identifica como si ya las hubieras hecho realidad. Entonces es cuando pierdes motivación y sentido de dirección, y dejas de hacer lo que tienes que hacer para cumplir tus proyectos.

Otra de las razones es el falso sentido de avanzar. Cuando contamos nuestras metas, también podemos sentir la sensación de que ya estamos avanzando, que hemos dado un paso hacia adelante en el camino a sus metas. Sin embargo estás exactamente en el mismo lugar que estabas antes de contar todos tus planes, y esa sensación, no es más que nuestro cerebro incapaz de diferencia entre hacer y decir. Avanzas camino a tus metas, cuando trabajas en ellas cada día, y actúas, más no cuando las cuentas.

La solución. Puede ser no contar tus metas, y menos sólo por la mera satisfacción de contarlo, no al menos sin tener un avance importante en ellas. O si las vas a contar al principio, asegúrate de que las personas a quienes se las cuentas, son personas que están 100% dispuestas a ayudarte a cumplir tus metas. no personas con sólo curiosidad de saber, o poco interés, y que no están dispuestas a ayudarte realmente.

Otra táctica puede ser en caso de que quieras contar tus metas, buscar una manera de que cuando las cuentes, no te motive, ni despiertes esa sensación de sentirte realizado, para que no pierdas la motivación, el sentido de dirección y la expectativa en torno a tus planes.

Espero te haya puesto a reflexionar sobre a quien y como cuentas tus proyectos, y sepas que sin saberlo, puedes estar perjudicando tus planes, sólo por un detalle, que parece poco importante, pero que quizá tiene más inferencia que la que tu te imaginas.

Un abrazo y vuela alto :)

(Lea aquí: Sí eres lector, no hagas estas 5 cosas)






4 comentarios:

  1. Interesante articulo! tenia por mala suerte contar mis proyectos a los demás... y ahora tengo una excusa científica para seguir quedándome callado jajaja.

    ResponderBorrar
  2. Interesantisimo! Asi sucede cuando uno lo cuenta y no le va bien el negocio! Y se dice " es que fulanito (a quien uno le contó el poyecto) me empavo en negocio! Sin saber que es uno mismo que pierde el interes por lo descrito por Ud. Gracias!

    ResponderBorrar